Re: De compras con Embry....

por **EvA SwAn** Miér Abr 15, 2009 2:19 am

La velada transcurrió entre risas y tragos muuuuuuuuuy largos de Embry. Dios mio le estoy pervirtiendo...si no fuera porq su metabolismo aguanta el cuadruple que el de un humano el alcohol tenía que estar doblado ya...

-A mi los colores ya se me estan subiendo y no llevo ni la mitad de la mitad que tu!!! Eres un alcoholico anónimo.-dije sonriendo a Embry.

-Bueno ahora es el turno de preguntas que una novio y un novio deberian saber el uno del otro no?-continué cambiando de tema y aprovechando nuestro momento algo deshinibido.

-Ummm ¿cuántas novias has tenido?

por **Embry Call** Miér Abr 15, 2009 3:30 am

La cena me estaba sentando genial, y no podría haberme sentado de ninguna otra forma estando junto a Eva. Aunque había pedido un montón de comida, no dejé nada en los platos. Eva y yo hablamos durante toda la cena, y acabó convenciéndome de que me quedara con la ropa... no era justo, se aprovechaba del poder que tenía sobre mí.
En un momento concreto observé a Eva mientras masticaba: sus mejillas sonrojadas, el movimiento de su mandíbula, el ligero palpitar de sus sienes, sus ojos entrecerrándose bajo el placer del sabor. Eva alargó la mano para coger la copa de vino y sus ojos se encontraron con mi mirada. Sonrió sin separar los labios y dio un trago.

-A mi los colores ya se me estan subiendo y no llevo ni la mitad de la mitad que tu!!! Eres un alcoholico anónimo. -me dijo tragando y ampliando su sonrisa.

La miré un segundo y no me extrañaba que el vino le afectara más que a mí: había comido mucho menos que yo y a mí el vino me entraba como agua con todo lo que había comido. Además su cuerpecito era la mitad del mío.

-Qué poco aguante... -bromeé y Eva me frunció el ceño, volvió a sonreír y cambió de tema.

-Bueno ahora es el turno de preguntas que una novia y un novio deberian saber el uno del otro no? -una novia y un novio, casi no podía creer que tuviera aquello con ella, era demasiado bueno. Pero por un momento temí lo que Eva pudiera preguntarme, había tantas posibilidades de decepcionarla... -Ummm ¿cuántas novias has tenido? -continuó entonces. Noté como me ruborizaba.

-Pues... yo no... bueno, tú... eres la primera. -agaché la cabeza mirando la copa, más tímido de lo normal en mí-. ¿Y tú? -le pregunté deseando que me hablara más de ella, intentando evitar que me viera como un crío...

por **nessie_cullen** Jue Abr 16, 2009 12:27 pm

[Interrupción]...LLamada de Nessie:

- Primi…preciosa…¿cómo estáis?…
Oye que estamos en la mansión ya…nos hemos vuelto…¿Qué váis a pasar el día en Seatle? …Está bien, cuando acabéis con vuestra primera luna de miel podéis veniros…y ya sabes, siempre con sentido (risas)…¿Qué?...Si yo estoy bien, debe ser el frío, que me ha dado por coger un constipado o algo por eso tengo la voz quebrada…no, no te preocupes, disfruta….te echo de menos, haber cuándo podemos hacer otra de nuestras salidas femeninas….un beso –

por **Embry Call** Sáb Abr 18, 2009 6:50 pm

Justo en ese momento sonó el teléfono de Eva, impidiendo que contestara a mi pregunta. Odiaba aquel maldito teléfono, pero era una llamada de Nessie, así que no me molestó como los mensajes de la otra vampira...
Eva habló durante unos minutos, y cuando colgó la miré expectante, esperando a que contestara mi pregunta. Pero ella se acercó a mí, pegando su cuerpo al mío, me acarició el pelo y me miró un segundo a los ojos. Yo levanté mi mano para acariciarle la mejilla y el cuello, y la besé con ternura. Prolongamos el beso hasta que me sentí casi hipnotizado. Entonces Eva se separó de mí y me habló en un susurro.

-Voy al baño, ahora vengo... -me dio un piquito rápido y se levantó.

Observé sus pasos mientras se alejaba: su pelo danzando sobre su espalda, el contorno de sus caderas, sus brazos balanceándose a cada lado de su cuerpo... Nunca me había sentido tan feliz como con Eva. Me apoyé en el respaldo del sofá y di otro trago de vino.
Esperé a que Eva volviera, pero tardaba muchísimo. Ella ya había pagado la cuenta, así que cogí su móvil, que se lo había dejado sobre la mesa y fui hasta la puerta del baño.
Eché un vistazo al restaurante: estaba lleno de parejas, y en un rincón había un grupo de unas cinco o seis personas. Esperé durante un largo rato, pero Eva no salía y me empecé a preocupar, así que abrí la puerta y entré.

-¿Eva?... -dije elevando la voz- ¿EVA?

Nadie contestó. Entré en el baño de chicas y estaba completamente vacío.
Salí del restaurante y miré hacia un lado y otro del centro comercial, pero no veía a Eva por ninguna parte. Di una vuelta por los alrededores del restaurante, pero Eva no estaba allí. No entendía qué pasaba, ¿sería otra de sus bromas? Deseé con todas mis fuerzas que se tratara de eso, ya que aquella situación estaba empezando a asustarme...

por **EvA SwAn** Dom Abr 19, 2009 5:44 am

Mientras estaba en el baño miré mi rostro en el espejo. Tenía los mofletes sonrojados debido al vino y una mirada dulce.. eso se debia a mi acompañante eche un poco de agua en mi cuello para refrescarme cuando note que las rodillas me fallaban, me sentía mareada, sin fuerzas... me agarré a la pica y grite casi sin fuerzas "Emmmbry"...

....Cuando me desperté ya no me encotraba en el baño del restaurante.. la cabeza me dolía un poco y alguien impidio que la moviera.. oí voces a mi alrededor y al abrir los ojos me encontraba en una habitación peqeuñña sobre un sofá con las piernas en alto. Un paño húmedo se deslizó por mi frente hasta el cojín cuando giré mi cabeza para ver la cara de mi Em. No le ví a él sino a un chico musculoso con ropa de pinche agachado sobre mi con cara de preocupación y detrás de él un hombre mayor de canas y un joven camarero que habia visto anteriormente.

-¿Te encuentras mejor?
-Si gracias ¿dónde estoy? ¿qué ha pasado?.. y mi acompañante
-No lo sé. James vete a buscarlo por favor.-dijo dirigiendose al joven camarero que salio al instante de la habitación.
-Toma bebe un poco de tónica te sentrá bien, o si prefieras aquí tienes agua. Te has desmayado en el baño y te he oido caer cuando iba al almacén. Justo ahora ibamos a llamar al médico.
-No, no, no. Me encuentro bien sólo ha sido un desmayo sin importancia de verdad. Soy hipotensa aveces me pasa cuando tengo mucho calor gracias por todo.-dije incorporandome mientras su mano me sostenia por el codo.

En ese momento entró el chico y dij que Embry no estaba ya en el local ¿ha donde había ido? Mi respiración comenzó a agitarse de nuevo.. se habia ido sin mi... no me habia dado cuenta hasta ahora de lo mucho que me costaria respirar cuando el me dejrá, de la unión tan fuerte que me unía a ese engendro adorable. En ese momento el pinche se quitó el denlantal cogió su chaqueta de la mesa de al lado de la puerta de salida y me la puso en los hombros.
-Vamos te acompañaré a la puerta salgamos por detrás que hay una cabina y lo llamas por telefono. Así te da algo de aire que aun estas paliducha.

Acto seguido me saco medio en volandas del restaurante y yo seguía en una especie de shock concetrada en respirar...se ha ido... se ha ido y me ha dejado otra vez... sin decirme nada...
Cuando estuve en la calle agradecí el aire fresco pero eso tambien hizo que las lágrimas comenzaran a brotar, mi acompañante se puso nervioso y susurro palabras tranquilizadoras para que me calmará mientras me acercaba al telefono publico... Al parame frente a él dije en un susurro:
-No tiene móvil y no me se el numero fijo de su casa.

En ese momento la voz de Embry furiosa y asuatada a la vez se oyó de fondo en la calle gritaba mi nombre en todas direcciones. Miré en la dirección de la voz y eche a correr hacia ella dejando atrás a mi acompañante medio sonriente y su cazadora.
A la vuelta de la esquina ví el pelo del color del carbón ondular al viento sobre el cuerpo perfectamente diseñado de Embry, se movía frénetico de un lado a otro y entonces me vió. Sus ojos se pararon en mi rostro con alivio y luego preocupación, por las lágrimas supuse, esboce una sonrisa minetras echaba a correr hacia él.

-No te has ido, no me has dejado....-dije mientras sollozaba entre sus brazos sintiendo su calor sobre mi cuerpo aún destemplado.
-Pues claro que no.¿Dónde estabas? Me he preocupado muchisimo hace casi media hora que te busco.
-Me he desmayado en el baño y me han llevado al privado para que me recompusiera. Perdona no se que me paso estaba mirandome al espejo y derrepente me mareé, fue extraño, me sentía débil derrepente como sin fuerzas. Creo que es por el ajetreo de hoy y mi falta de sueño. Llevame a "casa".
-Vale ahora mismo vamos a casa de los cullen.
-No, he dicho que me lleves a casa ....y quiero decir tu casa, porque quiero que mi casa sea tu casa. Para siempre.-dije y me aferré con más fuerza al cuerpo de Embry.

((ya lo coloreare que hoy no tengo ganas:P)

por **Embry Call** Dom Abr 19, 2009 5:26 pm

Pasé mucho tiempo dando vueltas por el centro comercial, pero no había ni rastro de Eva. Corrí hacia el aparcamiento pensando en que solo podían ocurrir dos cosas: la primera, que el coche de Eva siguiera allí y ella aún se encontrara en el centro comercial, aunque perdida. La segunda, que el coche no estuviera y Eva se hubiera marchado sin mí.
Deseé con todas mis fuerzas que se tratara de la primera opción, pero no podía evitar el temor que me causaba la segunda. ¿Y si Eva había decidido que no quería estar conmigo y me había abandonado?¿Y si nunca más querría mirarme?¿Había dicho o hecho algo que la hubiera dañado?... Corrí más deprisa y la gente se apartaba de mi camino y me miraban atónitos. Pero me daba igual lo que pensaran, solo quería ver el coche de Eva.
Llegué a las escaleras mecánicas y las bajé de tres en tres, entré en el aparcamiento y corrí por el pasillo C. Pasé siete coches, y allí estaba el octavo: el seat león de Eva.
Respiré aliviado y al llenar los pulmones de aire me inundó el olor de Eva. Sentí una fuerte presión en el pecho, y de pronto recordé la reunión con la manada, las palabras de Jacob y el dolor de Eva y Nessie... Disfrutaba tanto estando junto a Eva, que en aquel centro comercial, había olvidado todo el peligro.
El miedo creció aún más en mi interior, potenciado por la furia de pensar que alguien pudiera hacerle daño. Eché a correr de nuevo y salí a la calle, donde mi carrera volvió a atraer las miradas de la gente, que ahora sentía clavadas en mi nuca.
Corrí alrededor del centro comercial y cada vez me sentía más desesperado, tenía que encontrarla... necesitaba encontrarla...
Seguía apretando el móvil de Eva en mi mano derecha cuando de pronto el olor de Eva llegó hasta mí con más intensidad, y no pude evitar llamarla.

-¡Eva! -grité al aire- ¡EVA!...

De pronto noté su presencia como un hilo de electricidad que se aferraba a mi estómago, me giré y la vi doblando la esquina. Solté todo el aire de golpe y cerré los ojos un segundo, estiré los brazos hacia ella y me acerqué a grandes zancadas. Ella corrió hacia mí y chocó contra mi pecho, apretando sus brazos alrededor de mi cintura. La estreché con fuerza y hundí mi rostro en su pelo.

-No te has ido, no me has dejado....-me dijo sollozando, y yo sequé sus lágrimas con mis pulgares.
-Pues claro que no. -contesté totalmente confuso- ¿Dónde estabas? Me he preocupado muchisimo hace casi media hora que te busco.
-Me he desmayado en el baño y me han llevado al privado para que me recompusiera. Perdona no se que me paso estaba mirandome al espejo y derrepente me mareé, fue extraño, me sentía débil derrepente como sin fuerzas. Creo que es por el ajetreo de hoy y mi falta de sueño. Llevame a "casa".
-Vale ahora mismo vamos a casa de los cullen. -le dije con ternura para calmarla e intentar calmarme yo también.
-No, he dicho que me lleves a casa ....y quiero decir tu casa, porque quiero que mi casa sea tu casa. Para siempre.-la miré a los ojos y supe que hablaba con franqueza. Después de aquel susto, oírla decir eso me hacía sentir lleno de dicha.

Me incliné hacia ella y la besé con dulzura, sintiéndome tremendamente aliviado. Cuando me separé de su beso, el camarero que nos había atendido en la mesa asomó la cabeza por la esquina de donde había salido Eva. Le hice un gesto a modo de agradecimiento y él me sonrió. Rodeé a Eva por la cintura y la dirigí hacia el aparcamiento. Llegamos junto a su coche y Eva sacó las llaves, pero yo se las quité y la acompañé hasta el asiento de copiloto. Ella no rechistó, así que me subí por el lado del conductor y me giré hacia ella antes de arrancar. Deslicé una mano por su cuello hasta su nuca y hundí mis dedos en su pelo.

-Eva, ¿estás bien? -le pregunté preocupado- ¿Cómo te encuentras?
-Estoy bien... -me sonrió y me acarició la mejilla-. Solo quiero ir a casa.

La besé suavemente y Eva se aferró a mi camiseta con un puño. Nos pusimos el cinturón y arranqué en dirección a nuestra casa.

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