Extraña mazmorra...

En mi mente sucedían muchas cosas a la vez:

Por una parte, sentía que estaba en otro mundo, en la oscuridad total. Ningún sonido parecía preocuparme y no sentía nada.

Por otro lado, escuchaba los gritos desesperados a mi alrededor, sentía como mi amado Emmett me sostenía contra él, escuché cuando gritó mi nombre y deseaba con todo el corazón poder contestarle. Decirle cuánto le amaba, y que no se preocupara por mí.

Pero la parte más extraña de mi cabeza sostenía la idea de que era una estúpida. ¿Cómo podía haber dejado que los seres que amaba se arriesgaran por mí? Debería haberme quedado en el piso mientras que los demás ayudaban a los otros a salir de allí. Me sentía muy culpable; Jazz tendría que haber estado junto a Alice, protegiéndola, y en cambio había estado tratando de sacarme de allí.
Emmett se había desesperado buscándome: ¿Y si se distraía gracias a mí?

Intenté revolverme en los brazos de mi Emmett, con el fin que me entendiera y que me deje allí. Pero sólo pude hacer un pequeño movimiento, que de seguro mi amado vampiro no podía haber notado.

Por fin nos habíamos reencontrado con el resto de la familia.., .analicé a todos con la mirada para ver si estaban bien, por lo menos todos estaban vivos, la peor parada había sido Rose, era todo muy extraño..¿cómo habría llorado?,luego estaba Carlisle, con su pierna, lo demás parecían magullados como yo pero al fin y al cabo estaban bien.

-Rose, cariño...-la besé en la frente Emmet tuvo que agacharse para que lo hiciera, seguidamente le agarré la mano-No te preocupes hermanita, vamos a salir de esta.

Nos dispusimos a salir de ese horrible lugar a esperar en la entrada que vinieran los coches que llevarían a Carlisle y Rose